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domingo, 11 de noviembre de 2018

NO TODO VALE EN TELEVISIÓN.

Por curiosidades de la vida, uno va cambiando de canal televisivo buscando algo entretenido que aporte cultura o conocimientos, y en esos saltos de canales, te encuentras programas de los cuales las cadenas presumen cada vez de ser los más vistos en su franja horaria, no coincidiendo en ocasiones los resultados entre ellos mismos.

El problema en si no son los programas, más bien reside en la falta legislativa de ciertos contenidos inmorales, en donde los supuestos supervisores estatales multan ciertos contenidos, con ridículas sanciones, no velando en ningún momento por los conocimientos y contenido, que deben ser emitidos en todo momento objetivamente.

Antaño, y sin conocerlo, la radio era la pionera en información, novelas, canciones, etc., siempre con la supervisión que convenía al poder, vetando en innumerables ocasiones, y cuando digo antaño, no me refiero a la época de la dictadura, más bien dichas actuaciones han seguido produciéndose hasta hace poco, eso sí, dependiendo del calado e ideología de la cadena.

Hoy en día nos encontramos con unos contenidos que se consideran demócratas en su propio lenguaje, afirmando por encima de la moralidad, noticias y actos falsos, escondiéndose detrás del supuesto colaborador, periodista, o famosos de turno, ocupando el puesto más que inmerecido de aquellos que apuestan por la transparencia de una convivencia veraz y sin estar expuesta a la toxicidad.

A la juventud actualmente, se les da un mensaje más que equivocado, en donde el libertinaje es sinónimo de libertad democrática. Todo vale para obtener una cuota de pantalla, da igual las multas que ponga el legislador, ya que la rentabilidad económica en publicidad, supera las sanciones.- (“EL MUNDO” 04/04/17.- Entre los sectores vigilados a día de hoy por este supervisor se encuentra el audiovisual, en el que se han impuesto, desde que el organismo está en funcionamiento, multas por valor de 11.504.828 euros) (1).

Uno de los programas que más multas acumula por su contenido inadecuado para menores, no es otro que “Sálvame”. En la publicación del periódico “El Salto”, de 25/07/18.- este informa de que: “La Comisión Nacional de Mercados y la Competencia (CNMC) ha sancionado a Mediaset con 1.094.006 euros y 207.302 euros en dos expedientes por la emisión de contenidos audiovisuales que pueden resultar perjudiciales para el desarrollo físico, mental y moral de los menores, según indica el comunicado de Competencia. Concretamente, se trata de una infracción de los artículos 7.2 y 7.6 de la Ley General de Comunicación Audiovisual” (2).

Pero no es raro buscar en la red “multas a las televisiones”, “ingresos de publicidad”, y observar del por qué la pasividad de los tele operadores a la hora de las sanciones, ya que aunque los ingresos publicitarios hayan bajado en los últimos años, estas cadenas siguen obteniendo beneficios, a costa del libertinaje, exceso de publicidad, informaciones falsas, contenidos injuriosos, y un largo etc., que hacen confundir el entretenimiento, con la veraz información.
Es fácil seguir con este procedimiento, ya que el interés por parte de los ciudadanos en temas de información sobre la situación en España, ha hecho que parte de los españoles estén cansados de las actuaciones nefastas de algunos políticos, centrándose más en los intereses partidistas.

     El 28/12/2017, la Ser, publicaba la tabla de las 50 emisiones televisivas más vistas en el año 2017.- (3).



Como podemos observar en dicha tabla, el fútbol sigue manteniendo por goleada el entretenimiento de los españoles, en referencia a las cuotas de pantalla más altas de 2017, manteniéndose en 2018.


Ahora está de moda el programa “Gran Hermano Vip” de tele 5, con una audiencia que supera las expectativas  de la propia cadena, la cual ha sido puesta en cuestión por las redes sociales, dando a entender “que se manipulan los votos al interesarles que Mirian este nominada, para obtener más ingresos”, todo ello expuesto en la publicación de https://www.abc.es/play/television/noticias/abci-ghvip-gran-hermano-tongo-miriam-techi-telecinco-201810182318_noticia.html , en el cual se expresan los comentarios en las redes sociales, tales como;

“Permitir que le hagan bullying a una persona, defender a los acosadores y dejar mal a la víctima, permitir comentarios machistas, censurar una citación a la violación y sacarles el dinero con tongos”, inquietudes más que sospechosas, de las cuales son cómplices los personajes de turno.

Pero lo más vergonzante de estas actuaciones, es la imagen de convivencia que se está dando a la ciudadanía, siendo la juventud la que está más cerca de la admisión de las aptitudes de ciertos concursantes, los cuales, no escatiman en humillar y discriminar sin contemplaciones.

Cuestiones de cama, traiciones, especulaciones, difamaciones y un largo etc., son emitidos en directo, con la complicidad de un presentador que presume de moralidad dependiendo del horario de emisión, olvidándose de las multas millonarias que Tele 5 tuvo que pagar tras su paso por el programa “Aquí hay tomate”, durante las síes temporadas que estuvo en pantalla.

La cadena televisiva ha tenido que indemnizar tras ser condenada a personas como; “Gonzalo Miro (200.000€/2014), Norma Duval (140.000€/2011), Enrique Iglesias y Ana Kournokova (336.000€/2011), Duquesa de Alba (90.000€/2011), Pepe Navarro (270.000€/2011), Farruquito y 16 familiares (170.000€/2011), la cadena también tuvo que indemnizar con 100.000 euros a los herederos de Félix Rodríguez de la Fuente por violar el derecho al honor del prestigioso naturalista; y con 180.000 euros al matrimonio formado por José María Aznar y Ana Botella por anunciar una supuesta separación matrimonial en Aquí hay tomate” (4).

Aun siguiendo con el más que despreciable morbo, la cadena no tiene ningún problema en seguir manteniendo a ciertos personajes, los cuales, además de acudir a sus puestos de trabajo, dedican parte de su tiempo asistiendo a los juzgados por las demandas tramitadas contra ellos por injurias, calumnias, falta al honor, y como no, el incumplimiento constante de hacer programas con contenido especulativo e insultante.

Actualmente, la Comisión de los Mercados y la Competencia, está estudiando los distintos programas de “Gran Hermano Vip”, por la inclusión de contenidos de incitación al odio por razón de género, nacionalidad, discapacidad o religión (5).